problemas mas habituales al pasar la ITV

Problemas más habituales al pasar la ITV a tu vehículo

Pasar la ITV es una de esas tareas que son obligatorias para todo el que disponga de vehículo, tanto en Madrid como en cualquier otra ciudad. Y a menudo es algo que provoca más de un dolor de cabeza al que tiene que pasarla. Después de todo, si nuestro medio de transporte presenta una serie de defectos que puedan ser considerados un peligro para la seguridad corre el riesgo de no superar esta prueba. Si se llega a dar este caso, las autoridades pueden impedir que este vehículo circule, salvo para ser trasladado a un taller o para pasar otra inspección. En casos más graves, además, incluso se puede impedir su circulación por completo.
A continuación, vamos a explicar los problemas más habituales que pueden presentar un coche, una moto o una furgoneta:

Señalización y luces

Una de las primeras pruebas a superar será la comprobación de que tanto luces como el sistema de señalización (intermitentes y luces de freno, por ejemplo) funcionen bien. Si las luces de la matrícula fallan de algún modo solo supondrán una falta leve; pero, tanto si se da un mal funcionamiento de las luces de posición como de las de carretera, la inspección quedará automáticamente suspendida.

Neumáticos

Este es otro de los problemas más habituales a los que la gente no suele dar importancia. Los neumáticos se desgastan con el uso, y cuando eso ocurre van perdiendo el dibujo, que es lo que proporciona el agarre necesario al asfalto. Por eso, un desgaste que resulte evidente significará una pérdida importante de seguridad. Y también se traducirá en un motivo de peso para no superar la inspección. La ley es clara al respecto: está prohibido conducir cuando la banda de rodadura es inferior a los 1,6 centímetros.

Frenos

Además de los neumáticos, una de las pruebas más importantes que se realizan en la inspección, y que más a menudo se falla, es la de los frenos. Es por eso que siempre se recomienda revisar el líquido de frenos al menos una vez al año, además de prestar atención a posibles ruidos extraños. También se debe vigilar si el pedal responde con normalidad, o si su tacto resulta extraño. Los frenos, después de todo, son parte básica de la seguridad del coche. Y si no están lo bastante equilibrados se corre el riesgo de no pasar la prueba.

Emisión de gases

Hoy en día, este se ha convertido en uno de los principales motivos para no superar este examen. A lo largo de los últimos años se ha puesto mucho esfuerzo en tratar de reducir las emisiones de gases contaminantes en los medios de transporte, y es por eso que se debe hacer esta comprobación.
Se ha estimado que hasta un 11% de los conductores no logran superar la prueba de gases contaminantes, y esto es algo que puede obligar al usuario a acudir a un taller y realizar las reparaciones pertinentes si desea circular de nuevo. En este aspecto, además, los motores que más suspenden son los motores diésel.

Otros posibles problemas

Además de los que hemos enumerado, existen otros motivos por los que el conductor puede ver cómo se le deniega el aprobado durante la inspección. El mal estado de los amortiguadores es uno de los más comunes, así como los problemas en la dirección. Otros fallos a considerar son los golpes o abolladuras en la chapa porque, aunque en general no suelen tener mucha importancia, en ocasiones pueden ser considerados graves. Lo que sí puede suponer un problema es el mal estado de la matrícula. Parece poco importante, pero si tiene algún desperfecto que impida leer alguno de los números o de las letras, puede ser motivo suficiente para suspender.

Las consecuencias

Como ya hemos dicho, una ITV desfavorable puede impedir la circulación, medida que no ha sido implementada de forma aleatoria. Se estima que, durante un año, esto evita más de 17.000 accidentes de tráfico y más de 500 muertes en la carretera.

De todos modos, se debe tener en cuenta que circular sin pasar la inspección, o sin haber aprobado, puede conllevar multas considerables. En el caso de circular sin haber acudido a la revisión en el período establecido, la multa será de 200 euros. Pero, en el caso de circular a pesar de haber acudido a la revisión y haberla suspendido, dicha multa puede llegar a ascender hasta los 500 euros.

Pasar la ITV en Madrid o en otras ciudades del país, aunque pueda parecer problemático, no tiene por qué serlo si se conocen los posibles problemas que puede presentar el vehículo. Tanto si se trata de un coche, una furgoneta o una moto, es recomendable llevar a cabo una puesta a punto y así evitar cualquier sorpresa desagradable. Es positivo para la seguridad de todos, y te puede ahorrar disgustos y sanciones económicas.